miércoles, 22 de mayo de 2013

Lista Sancti Spíritus para acoger Festival Internacional de la Décima Toda Luz y Toda Mía.


La provincia de Sancti Spíritus acogerá del 23 al 26 de mayo el Primer Festival Internacional Toda Luz y Toda Mia. El importante evento dedicado a la décima se unirá a la Jornada Cultural Agropecuaria de la Universidad José Martí

En solo unos horas  Sancti Spíritus será la capital de la cultura campesina en Cuba. El proyecto Toda Luz y Toda Mia invita a su Primer Festival Internacional. A los tradicionales espacios dedicados a la décima se unirán los encuentros teóricos y el intercambio con destacados repentistas.

Confirmó Merari Mangli, principal organizadora del Festival que todo se encuentra lista para recibir a destacados decimistas cubanos y de países como Chile y Méjico.

Está conformada la presencia de las Casas Iberoamericanas de la Habana, las Tunas, integrantes del Grupo Aladécima y estarán con nosotros muchos de los escritores que este año han obtenido premios por la calidad de sus décimas.

El primer Festival Internacional Toda Luz y Toda Mía coordinara sus actividades junto a la Universidad José Martí que del 23 al 26 de mayo realizará la Jornada Cultural Agropecuaria.

El Dr. Martín  Fernández, Decano de la Facultad de Ciencias Agropecuarias del citado centro de Educación Superior aseguró en comparecencia televisiva  que la Universidad  está lista para que la cultura y la investigación se unen a favor de la identidad nacional. Estudiantes y profesores intervendrán con sus ponencias y se abrirán las puertas a los escritores y a los niños y niñas  de los talleres de repentismo infantil.

Creo que uno de los principales atractivos que tiene este encuentro es que la Universidad, el Centro Provincial del Libro y la Literatura, el Centro de Casas de Cultura, la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños en la provincia y la Dirección Provincial de Cultura estamos unidos con un objetivo común que es significar que la décima es patrimonio de la nación.


Las sedes principales de las actividades serán la Casa de la Guayabera, la Universidad espirituana y Cooperativas de Producción Agropecuaria de Sancti Spíritus- El primer Festival Toda Luz y Toda Mía contará con la presencia de la decimera chilena Bárbara Calderón, quien desde hace varios se encuentra en la provincia.

Soy enfermera de profesión y mujer decimera. He venido a Sancti Spíritus con el ánimo de ver que en este lugar de Cuba se defiende la décima como lo hacemos en Chile y en muchos lugares de Latinoamérica.

Además de la presencia de decimeros extranjeros también confirmaron su asistencia los escritores Jesús Arecenbia, colega del periódico Juventud Rebelde, profesor de la Facultad de Periodismo de la  Universidad de la Habana y excelente decimista. Al festival Internacional Toda Luz y Toda Mía asistirá el maestro  Pedro Pegléz, promotor del grupo Aladécima y Luis Paz.( Papillo), Director del Centro Iberoamericano de la Décima Cantada y el Verso Improvisado.

Del 23 al 26 de mayo Premier Festival Internacional de la Décima Toda Luz y Toda Mía.

El Oficio Americano de Martí

EL OFICIO AMERICANO DE JOSÉ MARTÍ
Por: WILKIE DELGADO CORREA
http://www.uneac.co.cu/
A ciento sesenta años de su nacimiento y a los ciento y dieciocho años de su caída en combate, Martí sigue siendo una compañía admirable para sentirle, más allá del largo trecho del tiempo, como un ser cálido y necesario para recorrer los caminos de la historia de nuestro país y del continente americano. Aquel instante del 19 de mayo de 1895, durante su primer y último combate de la guerra liberadora que soñó, convocó, organizó y desató, nunca dejó de estar presente la muerte como posibilidad y vaticinio en la vorágine de su lucha revolucionaria, principalmente durante el último lustro de su vida.
Al poner los pies en Cuba por Playitas de Cajobabo, el 11 de abril de 1895, se sintió un hombre pleno, lleno de alborozo y ansias, que tenía la misión de cumplir un deber magno, que, a la vez y en última instancia, representaba todo en su vida. Así lo dijo dos años antes en una misiva: “De mí no se ocupe, yo vivo hasta que haya dejado la carga en Cuba.”
 Él líder independentista estaba consciente, desde su juventud, que su deber último era vivir y morir por su país. Desde su temprana prisión sus actos y sus ideas fueron templando su sacrifico estoico y heroico.
Así, visionario como era, intuía su papel y el posible desenlace de aquella aventura tan soñada en los campos insurrectos de Cuba. Muchas eran sus zozobras en torno a los acontecimientos que se sucederían posteriormente a su arribo, los destinos posibles en torno a la fundación de una república “con todos y para el bien de todos” y su permanencia o no en territorio mambí.
“Yo me veo en el portal de mi tierra, con los brazos abiertos, llamando a mí a los hombres y cerrando el paso a los peligros. Con este corazón sencillo podemos fundar un pueblo. Y si me toca caer, será el gusto mayor…
“Ese es mi oficio, sin que se me quebrante el valor, ni me lo oscurezca siquiera mi inclinación real a quedarme en mi tierra, andando todos los días la jornada de todos. Yo soy un camino. Haré lo que mi tierra me mande.”
De todas formas en cualquier circunstancia; Martí era un hombre que estaba convencido que lo importante en la vida era salvar y vivir apegado a los principios. Esto lo resumió en estas ideas geniales: “Se ha de morir y vivir abrazado a la verdad. Y así, si se cae, se cae en una hermosa compañía.”
Su caída en combate aquel 19 de mayo, como bisoño guerrero impulsado vaya Ud. a saber con cuánto de ímpetu y de decisión reflexiva fundidos en un rayo volitivo, fue la concreción de un destino que quedó plasmado en forma indeleble con los actos y las ideas con los que Martí fue jalonando su corta pero fecunda existencia.
El día antes, en carta inconclusa a su amigo Manuel Mercado, dejó para las futuras generaciones su legado revolucionario antiimperialista al hacer explícitos que la independencia de Cuba constituiría, al mismo tiempo, la garantía de la independencia de nuestros pueblos latinoamericanos frente a las apetencias imperialistas del vecino del Norte y, también, una contribución al equilibrio del mundo.
Nada asombra en el genio de Martí cuyo espíritu visionario le permitió confesiones que fueron esencias de su tiempo y de los tiempos futuros. Y en forma certera definió su oficio, ejercido en sus relaciones particulares con muchos de los pueblos del continente e idealizado con el conjunto de nuestros pueblos, cuya unidad y destinos comunes concebía. He aquí su definición individual:
  “Vivir humilde, trabajar mucho, engrandecer América, estudiar sus fuerzas y revelárselas, pagar a los pueblos el bien que me hacen: este es mi oficio. Nada me abatirá, nadie me lo impedirá.”
Y, finalmente, al rendirle homenaje al Maestro cubano, con la concepción de que a pesar del tiempo transcurrido aún le mantenemos vivo -¡vaya milagro de la historia humana fecunda!- y nos queda el consuelo de que aquel acontecimiento aciago ocurriera tal como lo presagiara y describiera, a pesar de las heridas recibidas, del desplome mortal desde su caballo galopante, del fragor del combate y de las malezas circundantes: “Yo moriré sin dolor, será un rompimiento interior, una caída suave, y una sonrisa.”